El Concejo Deliberante de Morón aprobó ayer la reforma fiscal e impositiva que ajustará las tasas que pagan los contribuyentes en un 35% en general, aunque hay diferentes parámetros para el comercio y la construcción en el distrito. Las ordenanzas contaron con el voto del Frente de Todos y Juntos por el Cambio, aunque el radical Rolando Moretto decidió votar en contra las cuestiones generales, salvo las eximiciones para electrodependientes y jubilados.

«Este año tuvieron que ordenar las cuenta y se hizo frente a la baja de la recaudación por la crisis sanitaria. Recibimos una deuda de 1200 millones de pesos. Escuché que el aumento del 35% de la tasa supera la inflación prevista para el 2021. Eso habla de su falta de autocrítica», reprochó el concejal oficialista Marcelo González, avanzada la Asamblea de Mayores Contribuyentes que convalidó la ordenanza preparatoria votada semanas atrás.

La reforma mantuvo la «Tasa para estudio y prevención epidemiológica», que se aplica «sólo al 4% de los comercios del municipio», como bancos, entidades financieras, autopistas, bingos, empresas de telecomunicaciones y compañías aerocomerciales. Curiosamente, se aumentó la tasa para la actividad «aeroportuaria», pese a que el Gobierno (internas al margen) acaba de decretar el acta de defunción del Aeropuerto de El Palomar (queda la actividad de la Fuerza Aérea y pero la terminal pasaría a ser una simple aeródromo).

Por otra parte, se creó una nueva tasa de «contribución por participación de valoraciones inmobiliarias», que afectará a emprendimientos de desarrollo urbanístico.

Además, se resolvió en forma consensuada un aumento a la Tasa de Seguridad e Higiene que pagan las estaciones de servicio. El Ejecutivo había propuesto una suba del 140%, pero después de que ese sector explicara que las ventas siguen más del 30% abajo y que son «pymes, no petroleras», el ajuste quedó en un 60% de aumento, con descuentos del 10 al 25% por pago adelantado.

En este caso, la TISH es fija, por metro cuadrado del comercio, por lo que no importan cuánto facturen o en qué lugar del distrito estén estratégicamente ubicadas.

Por último, se volvió a facultar al intendente a sacar por decreto un nuevo ajuste en el último trimestre del 2021, si así lo quisiera, tal como se votó en julio pasado, en la última reforma fiscal (en la que, por ejemplo, se creó la Tasa Covid). En enero pasado el gobierno local había aumentado las tasas un 50%.